El primer sábado de las fiestas patronales de Nules se vio empañado por un violento incidente que dejó a un joven de 18 años gravemente herido tras ser apuñalado. La pelea, que involucró a al menos dos decenas de personas, tuvo lugar a las puertas de una discoteca en el polígono Senda Mitjana, alrededor de las 6:30 de la mañana. Los servicios de emergencias fueron alertados tras recibir una llamada que informaba sobre la reyerta, en la que se mencionaron armas blancas y, según algunos testigos, incluso armas de fuego.
La fiesta, que se encontraba en su apogeo, pronto se tornó en caos. Los testigos relatan que alrededor de 20 personas estaban implicadas en la pelea, pero al llegar la Policía Local, la multitud se dispersó rápidamente. Las huellas del ataque eran evidentes: rastros de sangre manchaban el suelo y algunos vehículos estacionados, mientras que una luna rota sugería que alguien había caído sobre un coche. Los testigos afirmaron que el joven herido recibió al menos un par de puñaladas, lo que llevó a la activación de dos ambulancias, una SVB y una SAMU, que lo trasladaron al Hospital de la Plana, donde permanece ingresado con pronóstico reservado tras ser operado.
La respuesta inicial al incidente fue proporcionada por la Policía Local, aunque los testigos expresaron su preocupación por la escasa presencia policial, señalando que solo había una patrulla con dos agentes, uno de los cuales no estaba armado. Esto es común en los agentes que están en periodo de prácticas, pero la situación requería una respuesta más contundente. La Guardia Civil llegó aproximadamente 20 minutos después, asumiendo la investigación del caso. La Policía Judicial de Burriana se ha encargado de esclarecer los hechos y de identificar al autor del apuñalamiento y a los demás implicados, aunque hasta el momento no se han realizado detenciones.
Los testigos también coincidieron en que los agresores no eran del pueblo, lo que añade un elemento de preocupación sobre la seguridad en eventos públicos. La pelea ocurrió en el exterior de la discoteca, donde los implicados no lograron entrar, aparentemente porque no se les permitió el acceso. Durante los fines de semana de las fiestas patronales, los locales de ocio suelen extender su horario de cierre, lo que provoca una mezcla de celebraciones y el inicio de la jornada laboral para algunos trabajadores, creando un ambiente propenso a conflictos.
La violencia en eventos festivos no es un fenómeno nuevo, pero este incidente ha puesto de relieve la necesidad de una mayor vigilancia y medidas de seguridad en las celebraciones locales. Las fiestas patronales, que deberían ser un momento de alegría y convivencia, se ven amenazadas por la posibilidad de que situaciones como esta se repitan. Las autoridades locales y los organizadores de eventos deben trabajar juntos para garantizar la seguridad de todos los asistentes y prevenir que la violencia empañe el espíritu festivo.
La comunidad de Nules se encuentra en estado de shock tras el incidente. La preocupación por la seguridad en eventos públicos ha crecido, y muchos ciudadanos exigen respuestas y acciones concretas para evitar que episodios de violencia se repitan en el futuro. La colaboración entre la Policía Local y la Guardia Civil será crucial para abordar este problema y restaurar la confianza de la comunidad en la seguridad de sus festividades.
A medida que se avanza en la investigación, la comunidad espera que se tomen medidas efectivas para garantizar que las fiestas patronales de Nules puedan continuar siendo un espacio de celebración y alegría, sin el temor a la violencia. La situación actual ha puesto de manifiesto la importancia de la seguridad en eventos públicos y la necesidad de una respuesta rápida y efectiva ante cualquier incidente que pueda poner en riesgo la integridad de los ciudadanos. La violencia no tiene cabida en las festividades, y es responsabilidad de todos trabajar para que así sea.