La política extremeña se encuentra en un ambiente de incertidumbre ante la posibilidad de elecciones anticipadas. La presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, ha señalado que si no se logra un acuerdo sobre los presupuestos autonómicos para 2026, se convocarán elecciones. Esta situación ha generado un clima de tensión entre el Gobierno regional y la oposición, que ve en el rechazo a las cuentas una estrategia del PP para forzar un adelanto electoral.
El próximo martes se celebrará un debate crucial en el Parlamento regional, donde se votarán las enmiendas presentadas por los grupos de oposición. La posibilidad de que estas enmiendas prosperen podría llevar a la muerte del proyecto de presupuestos, lo que abriría la puerta a la convocatoria de elecciones para el 21 de diciembre. La jornada se presenta como un punto de inflexión, ya que la abstención de Vox podría ser determinante para el futuro de las cuentas y, por ende, para la estabilidad política en la región.
