La selección española de gimnasia rítmica ha dejado una huella imborrable en el reciente campeonato mundial celebrado en Río de Janeiro, Brasil. Con un desempeño sobresaliente, las gimnastas españolas, en particular las valencianas Marina Cortelles y Lucía Muñoz, lograron colgarse dos medallas de bronce, una en el concurso general y otra en la final de cinco cintas. Este éxito no solo resalta el talento individual de las deportistas, sino que también pone de manifiesto el crecimiento y la proyección de la gimnasia rítmica en España.
### Un Camino hacia el Podio
El campeonato mundial de gimnasia rítmica se ha convertido en un evento crucial para las selecciones nacionales, y España no ha decepcionado. En la primera jornada de finales, el equipo español, compuesto por Inés Bergua, Andrea Corral, Andrea Fernández, Salma Solaun, y las mencionadas Marina Cortelles y Lucía Muñoz, se enfrentó a una dura competencia. A pesar de un inicio titubeante en la final de cinco cintas, donde cometieron un error que les costó puntos, las gimnastas se recuperaron y ejecutaron una rutina casi perfecta, logrando una puntuación de 25,950. Este resultado fue suficiente para asegurar el tercer lugar, superando a Israel, que obtuvo 25,300 puntos.
El oro en esta categoría fue para el equipo de China, que brilló con una puntuación de 27,550, seguido por Japón con 26,650. La actuación de las españolas fue un testimonio de su dedicación y esfuerzo, y aunque no lograron el oro, el bronce fue un reconocimiento a su arduo trabajo.
En la final de tres pelotas y dos aros, las expectativas eran altas. Las gimnastas españolas realizaron una actuación notable, pero se quedaron a solo 150 centésimas del podio, finalizando en cuarta posición con una puntuación de 28,200. Ucrania se llevó el oro con un ejercicio impecable, alcanzando 28,650 puntos, mientras que Brasil y China completaron el podio. A pesar de no haber conseguido más medallas, el equipo español demostró un nivel competitivo excepcional, consolidando su lugar entre las mejores del mundo.
### Un Futuro Brillante para la Gimnasia Rítmica Española
El éxito en el campeonato mundial es un reflejo del crecimiento de la gimnasia rítmica en España, especialmente en la Comunidad Valenciana. Las actuaciones de Cortelles y Muñoz han inspirado a una nueva generación de gimnastas y han puesto de relieve la importancia de la formación y el apoyo a los jóvenes talentos. La selección española ha tenido un año sobresaliente, con un triplete de oros en la Copa del Mundo y un triplete europeo, lo que subraya la consistencia y el alto nivel de rendimiento del equipo.
Sin embargo, no todo fue positivo para las gimnastas en el ámbito individual. En las competiciones individuales, las jóvenes deportistas no lograron alcanzar el podio. Alba Bautista finalizó en la 20.ª posición, mientras que Lucía González, en su primer campeonato mundial, ocupó el 24.º lugar. A pesar de estos resultados, la experiencia adquirida en este evento internacional será invaluable para su desarrollo futuro.
La participación de España en el campeonato mundial también se vio marcada por la clasificación por países, donde el equipo finalizó en la octava posición. Aunque no lograron clasificar para la final olímpica de París 2024, el rendimiento del equipo durante todo el ciclo ha sido impresionante, manteniéndose en el podio en competiciones europeas y mundiales.
La gimnasia rítmica en España está en un momento de auge, y el éxito de las gimnastas en Río de Janeiro es solo un capítulo más en una historia que promete seguir creciendo. Con el apoyo adecuado y la dedicación de sus atletas, el futuro de la gimnasia rítmica española parece más brillante que nunca. Las medallas obtenidas en este campeonato mundial son un testimonio del talento y la perseverancia de estas jóvenes deportistas, y un indicativo de que España seguirá siendo un competidor formidable en el escenario internacional.