Las recientes conversaciones entre el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero y Carles Puigdemont, líder de Junts, han culminado sin resultados significativos. Ambas partes han coincidido en que la situación actual se mantiene tensa, especialmente con la negociación de los Presupuestos a la vista. Junts ha reiterado que el apoyo parlamentario está condicionado al cumplimiento de los acuerdos previos, lo que incluye el reconocimiento del catalán como idioma oficial en la UE y la amnistía para los independentistas. La falta de avances ha llevado a los junteros a advertir que, si no se cumplen estos compromisos, no habrá respaldo para los Presupuestos, lo que podría poner en peligro la legislatura.
En el contexto de estas negociaciones, el presidente del Gobierno ha manifestado su intención de cumplir con los acuerdos establecidos en Bruselas. Sin embargo, los socialistas solo han logrado mantener reuniones periódicas, lo que no satisface las demandas de Junts. La situación se complica aún más con la introducción de la delegación de competencias en inmigración, que se discutirá en el Congreso, y la resistencia de algunos socios del Gobierno, como Podemos, que amenazan con bloquearla. La incertidumbre sobre el futuro de la legislatura persiste, y las decisiones que se tomen en otoño serán cruciales para determinar el rumbo político en España.