En la costa de Xàbia, un velero encallado ha captado la atención de turistas y curiosos, convirtiéndose en una atracción inesperada durante el verano. Este barco, conocido como el «Bau bau», no solo es un espectáculo visual, sino que también esconde un pasado intrigante relacionado con el narcotráfico. La historia de este velero comienza cuando fue interceptado por el Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, que lo encontró transportando una considerable cantidad de hachís. Tras ser confiscado, el barco fue subastado, y su nuevo propietario lo adquirió por 85.000 euros, una cifra notablemente baja en comparación con su valor real de medio millón de euros para un velero nuevo de características similares.
### El Temporal y el Encallamiento
El «Bau bau» fue arrastrado por un fuerte temporal que azotó la costa el 24 de julio, lo que lo llevó a encallar en el Primer Muntanyar, una zona de gran belleza natural y valor ecológico. Este incidente ha generado preocupación no solo por la seguridad del barco, sino también por el potencial riesgo de contaminación en una costa que alberga praderas de Posidonia oceanica y otras especies vegetales únicas. A pesar de que el nuevo propietario ha mantenido contacto con empresas especializadas en reflotamiento, aún no ha tomado medidas para vaciar los depósitos de combustible, lo que es crucial para evitar un desastre ecológico.
La operación de reflotamiento del velero se presenta como un desafío considerable. El barco tiene grietas en el casco y está encallado sobre una duna fósil, lo que complica aún más su extracción. Además, la profundidad del agua en la zona es insuficiente para el calado del velero, que es de 2,40 metros. Esto significa que cualquier intento de mover el barco debe ser cuidadosamente planificado para evitar daños adicionales. La presión de los turistas que observan la situación también añade un nivel de dificultad, ya que los especialistas prefieren trabajar sin la mirada atenta de una multitud.
### Implicaciones para el Turismo y el Medio Ambiente
El encallamiento del «Bau bau» ha tenido un impacto significativo en el turismo local. Los visitantes se sienten atraídos por la curiosidad de ver un barco encallado y han comenzado a tomar fotografías y compartirlas en redes sociales. Este fenómeno ha generado un aumento en la afluencia de turistas a la zona, lo que podría ser beneficioso para la economía local a corto plazo. Sin embargo, también plantea preguntas sobre la sostenibilidad de esta atracción y el impacto ambiental que podría tener si no se maneja adecuadamente.
La situación del velero también ha puesto de relieve la necesidad de una gestión más efectiva de los recursos marinos y la protección del medio ambiente en áreas costeras. La costa de Xàbia es conocida por su biodiversidad y belleza natural, y cualquier daño causado por el encallamiento del barco podría tener repercusiones a largo plazo. Las autoridades locales y las organizaciones ambientales deben trabajar juntas para garantizar que se tomen las medidas adecuadas para proteger este valioso ecosistema.
Mientras tanto, el «Bau bau» permanecerá en su lugar, ofreciendo una mezcla de intriga y preocupación. La historia de este velero, desde su incautación por narcotráfico hasta su actual estado de encallamiento, es un recordatorio de los desafíos que enfrentan las costas mediterráneas en términos de conservación y gestión de recursos. A medida que los turistas continúan llegando para ver el barco, la comunidad local debe equilibrar el interés turístico con la responsabilidad ambiental, asegurando que la belleza natural de Xàbia se preserve para las generaciones futuras.
