El 16 de octubre de 2025, Iker Casillas, el famoso exfutbolista español, denunció el robo de cinco relojes de lujo en su residencia. Este incidente no solo ha captado la atención de los medios, sino que también ha destapado una serie de eventos intrigantes que involucran a personas cercanas a su círculo familiar. La investigación, llevada a cabo por la Policía Nacional, ha revelado detalles sorprendentes sobre cómo se llevó a cabo el robo y quiénes están involucrados.
### La Investigación del Robo
La operación, conocida como «Santo», fue iniciada por el Grupo de Robos y Atracos de la UDEV Central. El nombre de la operación hace referencia al apodo de Casillas, conocido como «El Santo» por su destacada carrera en el fútbol. La investigación se centró rápidamente en la asistenta de Sara Carbonero, exmujer de Casillas, y su esposo, un vigilante de seguridad en la urbanización donde reside la periodista.
Casillas, quien había acumulado una colección de relojes de lujo, había mantenido un registro fotográfico detallado de cada pieza, incluyendo su modelo, marca y valor. Este inventario fue clave para la investigación, ya que permitió a los investigadores identificar rápidamente las piezas que faltaban. Al regresar de unas vacaciones, Casillas notó que cinco de sus relojes habían sido reemplazados por imitaciones de menor valor, lo que encendió las alarmas sobre un posible robo.
La asistenta, identificada como Lilian, había trabajado para la familia desde 2019 y tenía acceso regular a la casa de Casillas. Las investigaciones revelaron que, a pesar de no haber señales de violencia en la casa, solo los relojes de lujo habían sido robados, lo que indicaba un plan premeditado. La policía comenzó a seguir a Lilian y su esposo, Juan Carlos, quien había tenido problemas legales en el pasado.
### El Papel de la Asistenta y su Esposo
Lilian, de origen paraguayo, había mantenido una buena relación con Casillas y Carbonero, incluso después de su separación. Sin embargo, se descubrió que había tensiones subyacentes, especialmente entre ella y Carbonero. Fuentes cercanas a la asistenta sugirieron que había resentimientos que podrían haber influido en su decisión de participar en el robo.
El esposo de Lilian, Juan Carlos, fue identificado como el principal sospechoso en el caso. A pesar de no tener antecedentes criminales significativos, su trabajo como vigilante de seguridad en la misma urbanización donde vivía Casillas le otorgaba un acceso privilegiado. La pareja había planeado unas vacaciones a Sudamérica, lo que llevó a la policía a acelerar su investigación.
El 19 de octubre, mientras la policía seguía sus movimientos, Juan Carlos fue visto entregando uno de los relojes robados en una tienda de compraventa de oro. Este acto fue crucial para la detención de la pareja, ya que la policía pudo rastrear el reloj y confirmar su origen. En su casa, se encontraron varios relojes falsos, lo que sugiere que la pareja había planeado cambiar los relojes originales por imitaciones.
### La Motivación Detrás del Robo
Uno de los aspectos más intrigantes de este caso es la motivación detrás del robo. Juan Carlos ha declarado que sus problemas de juego, especialmente con la ruleta, lo llevaron a cometer el delito. Afirmó que había acumulado deudas significativas debido a sus apuestas, lo que lo llevó a actuar de manera desesperada. Aunque ha intentado desvincular a su esposa del robo, las pruebas apuntan a que ambos estaban involucrados en el plan.
La UDEV Central continúa investigando el caso, buscando las piezas restantes que aún faltan y rastreando el dinero que la pareja pudo haber movido en los últimos meses. La historia ha capturado la atención del público no solo por la fama de Casillas, sino también por la complejidad de las relaciones personales involucradas.
El robo de los relojes de Iker Casillas es un recordatorio de que incluso en el mundo de la fama y el lujo, las traiciones pueden surgir de los lugares más inesperados. La investigación sigue en curso, y el desenlace de esta historia promete ser tan intrigante como su inicio.
