La reciente decisión del Gobierno de España de monitorizar los discursos de odio en redes sociales ha cobrado relevancia tras el veto en Jumilla a celebraciones musulmanas en espacios públicos. Esta medida, impulsada por el Ministerio de Inclusión, busca abordar la creciente preocupación por el aumento de mensajes de odio, especialmente en el contexto de iniciativas que limitan la libertad religiosa y cultural. El Observatorio contra el Racismo y la Xenofobia (Oberaxe) será el encargado de llevar a cabo este seguimiento, utilizando herramientas automatizadas y análisis manual por expertos para garantizar la precisión en la identificación de contenidos problemáticos.
El incremento de discursos de odio ha sido alarmante, con un aumento del 384% en los mensajes detectados en redes sociales tras incidentes recientes en Torre Pacheco. Este fenómeno ha puesto de manifiesto la necesidad de una respuesta efectiva y rápida por parte de las plataformas digitales. En una reunión reciente, la ministra Elma Saiz se reunió con representantes de grandes empresas tecnológicas para discutir estrategias de moderación y la creación de un grupo de seguimiento permanente. La colaboración entre el Gobierno y estas plataformas es crucial para abordar el problema de manera integral y proteger la dignidad de todas las personas en el ámbito digital.