El ex presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, ha decidido renunciar a su puesto como presidente de la Comisión de Defensa del Congreso. Esta decisión se produce tras la compra de la empresa donde trabaja su hijo por parte de Escribano Mechanical & Engineering (EM&E), lo que podría generar un conflicto de intereses. Fabra, quien ha estado al frente de esta comisión desde el inicio de la legislatura, ha declarado que su salida es una medida preventiva para no interferir en el trabajo de su partido, el PP, liderado por Alberto Núñez Feijóo.
A pesar de dejar la presidencia de la Comisión de Defensa, Fabra mantendrá su acta de diputado, lo que le asegura una remuneración mensual de 6.960 euros, de los cuales 1.646 euros corresponden al suplemento por su cargo en la comisión. La empresa EM&E, que ahora tiene un 14,3% del capital de Indra, ha tomado medidas para gestionar los posibles conflictos de interés derivados de esta situación familiar, estableciendo una comisión independiente para evaluar la adquisición. Esta decisión de Fabra resalta la importancia de la ética en la política y la necesidad de evitar cualquier percepción de favoritismo o conflicto en el ámbito público.