La reciente dimisión de Carlos Martín, co-coordinador de Movimiento Sumar, ha desatado una nueva crisis en el partido liderado por Yolanda Díaz. Esta renuncia, motivada por problemas de salud, se produce en un momento crítico para la formación, que enfrenta desafíos significativos en el ámbito parlamentario y político. La salida de Martín, quien fue una elección personal de Díaz justo antes de las elecciones generales, deja un vacío en el liderazgo y plantea interrogantes sobre el futuro del partido.
La situación se complica aún más con la falta de apoyo parlamentario para iniciativas clave, como la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas. Sumar ha denunciado un «bloqueo sistemático» por parte del PSOE, su socio de coalición, lo que ha generado tensiones internas. Mientras tanto, la organización se prepara para evaluar su estructura de liderazgo en septiembre, considerando si mantener el modelo de co-coordinación o regresar a un liderazgo único. La incertidumbre en Sumar refleja la fragilidad de su posición en un entorno político cada vez más competitivo.