La reciente sentencia del Tribunal Supremo de España ha marcado un hito en el mundo del fútbol profesional, al ratificar el derecho de LaLiga a programar partidos los lunes y viernes. Esta decisión ha generado un amplio debate entre aficionados, clubes y la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), quienes han expresado su descontento con estos horarios. A pesar de las quejas, la resolución judicial establece un marco claro sobre la organización de las competiciones, lo que podría tener repercusiones significativas en la planificación de los encuentros y en la experiencia de los aficionados.
### El Contexto del Conflicto
El conflicto sobre la programación de partidos en días no tradicionales se remonta a 2019, cuando la RFEF, bajo la presidencia de Luis Rubiales, decidió no autorizar la celebración de encuentros los lunes y limitar los viernes. Esta decisión provocó un impacto considerable en la planificación de las competiciones, afectando tanto a la comercialización audiovisual como a la experiencia de los aficionados. Durante varios años, los clubes se vieron obligados a adaptarse a esta restricción, lo que generó frustración y confusión en el entorno del fútbol español.
LaLiga, por su parte, argumentó que la programación de partidos en estos días es crucial para maximizar los ingresos por derechos televisivos, que son fundamentales para la sostenibilidad económica de los clubes. En agosto de 2019, un juzgado de lo mercantil de Madrid permitió cautelarmente la celebración de partidos los viernes, aunque no los lunes. Sin embargo, en junio de 2020, la Audiencia Provincial de Madrid revocó esta decisión, permitiendo la programación de ambos días y subrayando que la RFEF no tenía la potestad para impedirlo.
### La Sentencia del Tribunal Supremo
La reciente sentencia del Tribunal Supremo ha confirmado de manera definitiva que LaLiga tiene la competencia exclusiva para fijar las fechas y horarios de los partidos, sin necesidad de autorización por parte de la RFEF. El tribunal ha declarado que cualquier intento de la federación para obstaculizar esta programación constituye un acto de competencia desleal. Este fallo no solo refuerza la posición de LaLiga, sino que también establece un precedente importante en la relación entre las distintas entidades que rigen el fútbol en España.
El Tribunal Supremo ha dejado claro que la coordinación entre LaLiga y la RFEF debe entenderse como un mecanismo para evitar interferencias con otras competiciones, como la Copa del Rey o las competiciones europeas, pero no como un control jerárquico. Esto significa que LaLiga puede seguir programando partidos los lunes y viernes, lo que ha sido recibido con alivio por parte de la patronal y los clubes.
LaLiga ha valorado positivamente esta resolución, destacando que refuerza la seguridad jurídica del fútbol profesional español y consolida el marco competencial establecido por la legislación vigente. Además, la patronal ha advertido sobre las consecuencias que podrían derivarse de impedir el correcto desarrollo de las competiciones, lo que podría haber llevado a pérdidas significativas para los clubes y la propia competición.
### Reacciones y Perspectivas Futuras
La reacción de los aficionados y de los clubes ha sido variada. Muchos seguidores del fútbol han expresado su descontento con la programación de partidos en días laborables, argumentando que esto dificulta su asistencia a los encuentros. Los clubes, por otro lado, han mostrado su apoyo a la decisión del Tribunal Supremo, ya que les permite maximizar sus ingresos y mejorar su situación financiera.
LaLiga ha señalado que esta sentencia abre la puerta para evaluar los daños y perjuicios ocasionados por la restricción de partidos en lunes y viernes, lo que podría llevar a una revisión de las políticas de programación en el futuro. La patronal ha enfatizado la importancia de mantener un equilibrio entre los intereses comerciales y la experiencia de los aficionados, sugiriendo que se podrían explorar alternativas para mejorar la asistencia a los partidos programados en estos días.
En resumen, la reciente sentencia del Tribunal Supremo no solo ha resuelto un conflicto legal, sino que también ha sentado las bases para el futuro del fútbol profesional en España. LaLiga continuará programando partidos los lunes y viernes, lo que podría tener un impacto significativo en la forma en que se vive el fútbol en el país. A medida que se desarrollen los acontecimientos, será interesante observar cómo se adaptan los clubes y los aficionados a esta nueva realidad.
