El Gobierno español ha reactivado el debate en la Unión Europea sobre la eliminación del cambio estacional de hora, una medida que ha estado vigente durante más de 45 años. Este planteamiento, liderado por el presidente Pedro Sánchez, busca que 2026 sea el último año en que se realicen estos ajustes horarios. Durante una reunión del Consejo de Transportes, Comunicaciones y Energía en Luxemburgo, se presentará la propuesta que busca un consenso entre los estados miembros para poner fin a esta práctica, considerada innecesaria por muchos ciudadanos.
La iniciativa surge en un contexto donde el 84% de la población española se opone a los cambios de hora, según una consulta de la Comisión Europea. Además, estudios recientes indican que el ahorro energético que se pretendía lograr con esta medida es mínimo, oscilando entre el 0,5% y el 2,5%. Los efectos negativos sobre la salud, como trastornos del sueño y falta de concentración, han llevado a la comunidad científica a cuestionar la validez de continuar con esta práctica. La propuesta de España se basa en la necesidad de escuchar a la ciudadanía y en la evidencia científica que respalda la eliminación del cambio horario.