La elección de la Fallera Mayor Infantil de València 2026 ha estado marcada por una serie de controversias y denuncias que han puesto en entredicho la transparencia del proceso. Padres de las participantes han presentado múltiples documentos, incluyendo requerimientos notariales y quejas formales, en los que acusan a miembros del jurado de irregularidades y falta de cumplimiento de las normas establecidas. Estas quejas han generado un clima de tensión y desconfianza entre los involucrados en el evento, que es uno de los más emblemáticos de la cultura valenciana.
### Irregularidades en el Proceso de Selección
Los padres de las niñas que aspiran a convertirse en la Fallera Mayor Infantil han denunciado que el proceso de selección no se ha llevado a cabo de manera justa. En sus escritos, mencionan que dos miembros del jurado, Rosa Ferris y Antonio Carceller, han incumplido las normas que rigen la elección. Ferris ha sido acusada de inasistencias reiteradas a las sesiones de evaluación, mientras que Carceller enfrenta acusaciones de conflicto de intereses debido a su relación personal con una de las candidatas.
Las quejas sobre Ferris son contundentes; se ha documentado que estuvo ausente en más de la mitad de las pruebas, lo que pone en duda su capacidad para evaluar a las participantes de manera objetiva. Por otro lado, las acusaciones contra Carceller se basan en su amistad con una candidata, lo que contradice las reglas que prohíben a los jurados tener relaciones personales o laborales con las aspirantes. Estas irregularidades han llevado a los padres a solicitar la paralización del proceso y la inhabilitación de los jurados implicados.
El Ayuntamiento de València ha tomado nota de las quejas y ha iniciado consultas para determinar si se puede actuar al respecto. Sin embargo, la respuesta inicial indica que solo la asamblea de presidentes tiene la autoridad para inhabilitar a los jurados, lo que complica la situación. La falta de acción por parte de las autoridades ha generado frustración entre los padres, quienes sienten que sus preocupaciones no están siendo tomadas en serio.
### Antecedentes y Contexto
Este no es el primer año en que surgen quejas sobre el proceso de selección de la Fallera Mayor Infantil. En 2023, un grupo de padres también presentó una carta de protesta, aunque en esa ocasión las quejas se centraron más en el trato recibido por parte de un jurado en particular. Sin embargo, este año las acusaciones son más graves y están respaldadas por documentos y testimonios que sugieren que el proceso está viciado.
La historia de las Fallas está llena de conflictos y controversias, y el caso actual no es una excepción. En 1995, por ejemplo, la elección de los jurados se retrasó varias semanas debido a desacuerdos entre la Junta Central Fallera y la asamblea de presidentes. Este tipo de situaciones no son nuevas en el ámbito fallero, y los padres temen que la falta de acción ante las irregularidades actuales pueda llevar a un desenlace similar.
Además, el caso de una candidata que no pudo participar en las preselecciones debido a su edad, conocida como el «limbo de los 14 años», ha puesto de manifiesto la necesidad de revisar las normas que rigen el proceso. Aunque la norma fue finalmente revocada, la situación generó un gran revuelo y evidenció la falta de flexibilidad en las reglas que rigen la elección de la Fallera Mayor Infantil.
Los padres que han presentado quejas este año están decididos a llevar su lucha más allá de las instancias administrativas. Han anunciado que están considerando presentar una denuncia formal a través de un gabinete de abogados, lo que podría llevar el asunto a los tribunales. Esto plantea la posibilidad de que el proceso de selección se vea aún más afectado por la incertidumbre legal.
La próxima asamblea de presidentes será crucial para determinar el futuro del proceso de selección. Los padres esperan que se tomen medidas para abordar las irregularidades denunciadas, pero también son conscientes de que cuestionar el sistema en su conjunto podría tener repercusiones más amplias en la comunidad fallera.
La situación actual ha puesto de relieve la necesidad de una mayor transparencia y responsabilidad en el proceso de selección de la Fallera Mayor Infantil. Los padres exigen que se respeten las normas y que se garantice un proceso justo para todas las candidatas. La comunidad fallera, que se caracteriza por su pasión y compromiso, ahora se enfrenta a un desafío que podría afectar la integridad de uno de sus eventos más queridos.
La elección de la Fallera Mayor Infantil no es solo un evento cultural; es un símbolo de la identidad valenciana. Por lo tanto, es fundamental que el proceso de selección se lleve a cabo de manera justa y transparente, para que todas las niñas tengan la oportunidad de participar en igualdad de condiciones. La comunidad fallera debe unirse para garantizar que el legado de las Fallas se mantenga intacto y que las futuras generaciones puedan disfrutar de esta tradición sin las sombras de la controversia.